Miércoles, Abril 24, 2024

Los desafíos que debe abordar la construcción de la Línea 7 en el corazón de Santiago

EL MERCURIO – Icónico. Así se puede definir al sector de Plaza Italia, que ha contemplado desde celebraciones políticas hasta festejos por triunfos deportivos.
Ahí se inician la Alameda, la avenida Providencia y Vicuña Mackenna, se emplaza una de las entradas a la autopista Costanera Norte y se ubica la estación de Metro Baquedano, que combina con las Líneas 1 y 5. Millones de personas transitan a diario por la zona.
Y es, justamente, por una desafiante obra del tren subterráneo que el sector congregará aún más ciudadanos en los próximos años.
Como parte de la Línea 7, que estará lista en 2026, Baquedano será también una de las 19 estaciones del proyecto que apunta a aliviar a la saturada Línea 1 en su segmento centro-oriente.
“Esta línea ayudará a descongestionar su tramo más cargado, entre Los Héroes y Baquedano, hasta en un 20%, y además disminuirá los tiempos de viaje entre Renca y Vitacura en hasta 60 minutos, devolviendo a dichos pasajeros hasta 15 días al año”, destaca la empresa.
Múltiples conexiones
Al sumar una nueva combinación, se convertirá junto a Cal y Canto —que ahora está en la 2 y 3— en una de las paradas que integran tres líneas, algo inédito en Chile.
En metros extranjeros, como el de París, es normal encontrarse con estaciones que intercambien pasajeros entre varias líneas. Así sucede, por ejemplo, con Châtelet-Les Halles, que ofrece conexiones con los servicios 1, 4, 7, 11 y 14.
En Santiago será un desafío mayor tanto en lo ingenieril como en lo logístico.
Patricia Galilea, académica de Ingeniería de Transporte de la U. Católica, asegura que “se debe investigar cómo deben ser las combinaciones, principalmente por la profundidad y la accesibilidad para todos los usuarios, incluyendo las personas en situación de discapacidad”.
Agrega que también es importante “que la combinación no genere muchos tiempos de movilidad para quienes hacen transbordos”.
Respecto de los posibles movimientos sísmicos, Sebastián Seriani, investigador en transporte de la Universidad de los Andes, dice que “las oscilaciones son más fuertes en altura que en subterráneo y Metro cuenta con ingeniería para poder enfrentarlos”.
Añade que “el desafío será en superficie: cómo se combinará con otros medios de transporte como la bicicleta y también la integración con los buses (…) Se deben priorizar los modos masivos en el espacio vial, ya que es una zona con varias pistas para autos en Andrés Bello”.
Mientras, Julio Nazar, urbanista de la U. del Desarrollo, explica que con las tres combinaciones “se debe analizar que existan buenos pasillos subterráneos que permitan una conexión espaciosa dentro del metro, para que incluso se vuelva una opción para quienes quieren solo cruzar, lo que podría despejar la superficie”.
El Parque Forestal
Una de las preocupaciones en la construcción es la intervención en el Parque Forestal. Esto porque la salida de la estación está emplazada en esa zona, mientras que el pique de construcción, según la licitación de la ingeniería de detalle, está cerca de Cardenal José María Caro, entre los puentes Purísima y Loreto.
Héctor Vergara, presidente de la junta de vecinos Parque Forestal, afirma que “el parque y su entorno se verán damnificados con esta obra de gran envergadura. Tendrán que desaparecer cerca de 30 árboles centenarios y creo que es posible aún evitar que ocurra”.
Eso sí, Metro sostiene que las faenas implican “el retiro de solo ocho árboles y la reubicación de dos. Además, el proyecto considera la reposición de 24 ejemplares en el sector”.
La intendenta Metropolitana, Karla Rubilar, asegura que se le solicitó a Metro una mesa de trabajo para “definir los espacios en los que se trabajará durante la construcción y la ubicación del acceso”, con el objetivo de que “existan los planes de mitigación vial y de espacio público”.
Mientras, el alcalde Felipe Alessandri afirma que se le entregó a la estatal alternativas para la ubicación de los accesos: “Una de esas opciones es que la salida se ubique al norte del río Mapocho, porque gran parte del flujo que saldría por una eventual salida en el Forestal, va a cruzar hacia Recoleta (…) La otra propuesta es hacer otra salida en la estación Baquedano”.

“(Por la situación del parque) solicitamos a Metro que entable una mesa de trabajo que involucre a las juntas de vecinos y la Intendencia”.
Karla Rubilar
Intendenta Metropolitana
“Se debe investigar cómo deben ser las combinaciones, por la profundidad y la accesibilidad para todos los usuarios”.
Patricia Galilea
Académica de la U. Católica


Fuente: El Mercurio, Lunes 10 de Junio de 2019

EL MERCURIO – Icónico. Así se puede definir al sector de Plaza Italia, que ha contemplado desde celebraciones políticas hasta festejos por triunfos deportivos.
Ahí se inician la Alameda, la avenida Providencia y Vicuña Mackenna, se emplaza una de las entradas a la autopista Costanera Norte y se ubica la estación de Metro Baquedano, que combina con las Líneas 1 y 5. Millones de personas transitan a diario por la zona.
Y es, justamente, por una desafiante obra del tren subterráneo que el sector congregará aún más ciudadanos en los próximos años.
Como parte de la Línea 7, que estará lista en 2026, Baquedano será también una de las 19 estaciones del proyecto que apunta a aliviar a la saturada Línea 1 en su segmento centro-oriente.
“Esta línea ayudará a descongestionar su tramo más cargado, entre Los Héroes y Baquedano, hasta en un 20%, y además disminuirá los tiempos de viaje entre Renca y Vitacura en hasta 60 minutos, devolviendo a dichos pasajeros hasta 15 días al año”, destaca la empresa.
Múltiples conexiones
Al sumar una nueva combinación, se convertirá junto a Cal y Canto —que ahora está en la 2 y 3— en una de las paradas que integran tres líneas, algo inédito en Chile.
En metros extranjeros, como el de París, es normal encontrarse con estaciones que intercambien pasajeros entre varias líneas. Así sucede, por ejemplo, con Châtelet-Les Halles, que ofrece conexiones con los servicios 1, 4, 7, 11 y 14.
En Santiago será un desafío mayor tanto en lo ingenieril como en lo logístico.
Patricia Galilea, académica de Ingeniería de Transporte de la U. Católica, asegura que “se debe investigar cómo deben ser las combinaciones, principalmente por la profundidad y la accesibilidad para todos los usuarios, incluyendo las personas en situación de discapacidad”.
Agrega que también es importante “que la combinación no genere muchos tiempos de movilidad para quienes hacen transbordos”.
Respecto de los posibles movimientos sísmicos, Sebastián Seriani, investigador en transporte de la Universidad de los Andes, dice que “las oscilaciones son más fuertes en altura que en subterráneo y Metro cuenta con ingeniería para poder enfrentarlos”.
Añade que “el desafío será en superficie: cómo se combinará con otros medios de transporte como la bicicleta y también la integración con los buses (…) Se deben priorizar los modos masivos en el espacio vial, ya que es una zona con varias pistas para autos en Andrés Bello”.
Mientras, Julio Nazar, urbanista de la U. del Desarrollo, explica que con las tres combinaciones “se debe analizar que existan buenos pasillos subterráneos que permitan una conexión espaciosa dentro del metro, para que incluso se vuelva una opción para quienes quieren solo cruzar, lo que podría despejar la superficie”.
El Parque Forestal
Una de las preocupaciones en la construcción es la intervención en el Parque Forestal. Esto porque la salida de la estación está emplazada en esa zona, mientras que el pique de construcción, según la licitación de la ingeniería de detalle, está cerca de Cardenal José María Caro, entre los puentes Purísima y Loreto.
Héctor Vergara, presidente de la junta de vecinos Parque Forestal, afirma que “el parque y su entorno se verán damnificados con esta obra de gran envergadura. Tendrán que desaparecer cerca de 30 árboles centenarios y creo que es posible aún evitar que ocurra”.
Eso sí, Metro sostiene que las faenas implican “el retiro de solo ocho árboles y la reubicación de dos. Además, el proyecto considera la reposición de 24 ejemplares en el sector”.
La intendenta Metropolitana, Karla Rubilar, asegura que se le solicitó a Metro una mesa de trabajo para “definir los espacios en los que se trabajará durante la construcción y la ubicación del acceso”, con el objetivo de que “existan los planes de mitigación vial y de espacio público”.
Mientras, el alcalde Felipe Alessandri afirma que se le entregó a la estatal alternativas para la ubicación de los accesos: “Una de esas opciones es que la salida se ubique al norte del río Mapocho, porque gran parte del flujo que saldría por una eventual salida en el Forestal, va a cruzar hacia Recoleta (…) La otra propuesta es hacer otra salida en la estación Baquedano”.

“(Por la situación del parque) solicitamos a Metro que entable una mesa de trabajo que involucre a las juntas de vecinos y la Intendencia”.
Karla Rubilar
Intendenta Metropolitana
“Se debe investigar cómo deben ser las combinaciones, por la profundidad y la accesibilidad para todos los usuarios”.
Patricia Galilea
Académica de la U. Católica


Fuente: El Mercurio, Lunes 10 de Junio de 2019

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