Viernes, Abril 19, 2024

¿Y el ferrocarril?

EL MERCURIO – El Sistema Portuario Central (SPC – San Antonio y Valparaíso), que en el año 2017 transfirió 2,5 millones de TEUs (contenedores equivalentes de 20 pies), en el año 2030 transferirá más de 3,5 millones de TEUs (70% serán contenedores de 40 pies). Esto representa un flujo de 16,5 millones de camiones al año.
Solo en marzo de 2030, los camiones que circularán por Valparaíso llegarán a 93.700, equivalentes a un promedio de más de 3.000 camiones diarios, es decir, 126 camiones por hora, considerando una operación continua de 24 horas al día. En San Antonio serán 96.700 camiones al mes, que equivalen a 130 camiones por hora.
Como en materia de volúmenes de transferencia los días no son todos iguales, ni la distribución diaria es uniforme, el flujo en una hora punta sería de 220 camiones por hora, es decir, casi cuatro camiones por minuto en cada ciudad. En suma, no es viable acoger el crecimiento de la carga solo por medio de camiones, ni por la trama urbana ni por las autopistas de conexión, sin graves impactos en congestión. Pero, además, el puerto de San Antonio está planeando una expansión que, en su etapa final —sumado al crecimiento de la carga transferida por Valparaíso—, triplicaría la capacidad actual del SPC. Esta ampliación no es posible sin un sistema ferroviario de envergadura: el Puerto de Gran Escala requiere de un ferrocarril de carga con una capacidad a la altura del proyecto y de las necesidades de la ciudad y sus habitantes.
Los primeros días de junio, el Gobierno anunció inversiones públicas y privadas por US$ 7 mil millones en infraestructura, lo que contempla ampliaciones de autopistas, vías rurales y sistemas de peajes inteligentes. Todas obras necesarias. Sin embargo, sorprende que no se incluya en este plan al modo ferroviario de carga, que —según estimaciones de esta Cámara— requeriría de inversiones por US$ 2.400 millones (financiables vía tarifas a la carga), para alcanzar estándares adecuados, sumando requerimientos de mantenimiento y ampliaciones de capacidad.
Nuestro sistema ferroviario de carga ha sido postergado por décadas. Ya no es posible que el país se siga desarrollando sin contar con adecuados servicios ferroviarios de carga.
Daniel Fernández K.
Presidente Cámara Marítima y Portuaria de Chile
Fuente: El Mercurio, Sábado 15 de Junio de 2019

EL MERCURIO – El Sistema Portuario Central (SPC – San Antonio y Valparaíso), que en el año 2017 transfirió 2,5 millones de TEUs (contenedores equivalentes de 20 pies), en el año 2030 transferirá más de 3,5 millones de TEUs (70% serán contenedores de 40 pies). Esto representa un flujo de 16,5 millones de camiones al año.
Solo en marzo de 2030, los camiones que circularán por Valparaíso llegarán a 93.700, equivalentes a un promedio de más de 3.000 camiones diarios, es decir, 126 camiones por hora, considerando una operación continua de 24 horas al día. En San Antonio serán 96.700 camiones al mes, que equivalen a 130 camiones por hora.
Como en materia de volúmenes de transferencia los días no son todos iguales, ni la distribución diaria es uniforme, el flujo en una hora punta sería de 220 camiones por hora, es decir, casi cuatro camiones por minuto en cada ciudad. En suma, no es viable acoger el crecimiento de la carga solo por medio de camiones, ni por la trama urbana ni por las autopistas de conexión, sin graves impactos en congestión. Pero, además, el puerto de San Antonio está planeando una expansión que, en su etapa final —sumado al crecimiento de la carga transferida por Valparaíso—, triplicaría la capacidad actual del SPC. Esta ampliación no es posible sin un sistema ferroviario de envergadura: el Puerto de Gran Escala requiere de un ferrocarril de carga con una capacidad a la altura del proyecto y de las necesidades de la ciudad y sus habitantes.
Los primeros días de junio, el Gobierno anunció inversiones públicas y privadas por US$ 7 mil millones en infraestructura, lo que contempla ampliaciones de autopistas, vías rurales y sistemas de peajes inteligentes. Todas obras necesarias. Sin embargo, sorprende que no se incluya en este plan al modo ferroviario de carga, que —según estimaciones de esta Cámara— requeriría de inversiones por US$ 2.400 millones (financiables vía tarifas a la carga), para alcanzar estándares adecuados, sumando requerimientos de mantenimiento y ampliaciones de capacidad.
Nuestro sistema ferroviario de carga ha sido postergado por décadas. Ya no es posible que el país se siga desarrollando sin contar con adecuados servicios ferroviarios de carga.
Daniel Fernández K.
Presidente Cámara Marítima y Portuaria de Chile
Fuente: El Mercurio, Sábado 15 de Junio de 2019

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