Jueves, Octubre 3, 2024

Con 3 nuevas líneas, Lo Barnechea y Lo Espejo no tendrán conexión al metro

EL MERCURIO – Mientras espera su micro bajo el inclemente sol de verano, Mario, vecino de Lo Espejo, declara: “No creo que nos pongan metro, porque ven a la gente de acá como marginales”.
Su comuna y Lo Barnechea son las únicas del Gran Santiago (34) que no tienen ningún trazado de la red subterránea considerado. Ni siquiera cuando operen las líneas 7, 8 y 9, desde 2026, y el servicio tenga 215 kilómetros de red y 191 estaciones.
Hoy son siete las comunas del Gran Santiago que no cuentan con estación de metro. Sin embargo, El Bosque se verá beneficiado con la extensión de la Línea 2 (2022); Renca, Cerro Navia y Vitacura tendrán conexión cuando parta la Línea 7, en 2026, y La Pintana tendrá su estación esa misma fecha, con la Línea 9.
El alcalde de Cerro Navia, Mauro Tamayo (Izquierda Ciudadana), comenta que aunque en su comuna vivan cerca de 130 mil personas, “no hay ninguna notaría ni centros comerciales. No tenemos oficina de Fonasa y contamos con solo dos bancos”.
Por lo anterior, celebra la futura llegada del metro, pues “actores públicos y privados son atraídos por una estación”. Ahonda en este punto y comenta que “se va configurando un valor distinto del uso de suelo y, por lo tanto, la llegada de servicios, porque habrá un mayor flujo de personas. Eso genera polos atractivos para inversiones de servicios útiles para la población”.
Fuera del sistema
Quien no se muestra tan optimista es el alcalde de Lo Espejo, Miguel Ángel Bruna (PPD). Para llegar al centro de Santiago, un residente de ese sector tiene dos opciones de transporte público: tomar un bus del Transantiago y combinar con el Metrotrén (viaje de 35 minutos), o subir a una micro y viajar hasta por una hora y media, si se circula en horario punta. Esto resulta paradójico, considerando que la comuna limita con dos autopistas y la cruza Av. Américo Vespucio.
Además, el edil afirma que no tener metro es un perjuicio para los vecinos, y que el Metrotrén, en vez de mejorar las cosas, las empeoró: “Hay más atropellos y delincuencia”.
Y enumera más carencias: “No hay cadenas de farmacias, hace poco abrimos la primera sucursal de banco, y solo hay tres cajeros automáticos, por lo que los vecinos tienen que ir a girar su sueldo a La Cisterna, lo que es un trayecto largo y peligroso”.
Su par de Lo Barnechea, Felipe Guevara (RN), secunda el deseo que tienen por acceder a la red. “Cerca de 800 mil trabajadores vienen diariamente, y el Transantiago colapsa. Puede ser que muchos de nuestros vecinos tengan auto, pero también quisieran ocupar un transporte público de calidad”, dice.
Soluciones
Bruna ha sostenido conversaciones con el alcalde de Cerrillos, Arturo Aguirre (PS), para ver si pueden abogar por una extensión de la Línea 4-A por Av. Américo Vespucio, hasta el Mall Plaza Oeste. Esta idea es apoyada por el director del Centro de Innovación en Transporte y Logística UDP, Franco Basso: “Américo Vespucio tiene la particularidad de poder hacer trazados en superficie. Cada kilómetro de la Línea 7 (que unirá de manera subterránea Renca con Vitacura) costará US$ 100 millones de dólares. En cambio, un tren en superficie sale la cuarta parte”, indica.
En el caso de Lo Barnechea, Basso sugiere “analizar un tranvía o transporte ligero que conecte al pueblo desde la futura estación Estoril de la Línea 7”. Además, constata que una meta a corto plazo de Metro de Santiago debiera ser “proveer a todas las comunas con su servicio”.
Guevara se muestra disponible para una mesa de trabajo con los alcaldes de Las Condes y Vitacura: “Estamos pidiendo una reunión con el Presidente Piñera para extender la Línea 7 hasta la esquina de Av. La Dehesa con Las Condes”, informa.
Mientras, Bruna espera conversar con la ministra de Transportes en marzo: “Creo que poco antes de 2030 tendremos metro. Vamos a estar jubilados, pero con metro”, afirma.
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Fuente: El Mercurio, lunes 04 de febrero de 2019

EL MERCURIO – Mientras espera su micro bajo el inclemente sol de verano, Mario, vecino de Lo Espejo, declara: “No creo que nos pongan metro, porque ven a la gente de acá como marginales”.
Su comuna y Lo Barnechea son las únicas del Gran Santiago (34) que no tienen ningún trazado de la red subterránea considerado. Ni siquiera cuando operen las líneas 7, 8 y 9, desde 2026, y el servicio tenga 215 kilómetros de red y 191 estaciones.
Hoy son siete las comunas del Gran Santiago que no cuentan con estación de metro. Sin embargo, El Bosque se verá beneficiado con la extensión de la Línea 2 (2022); Renca, Cerro Navia y Vitacura tendrán conexión cuando parta la Línea 7, en 2026, y La Pintana tendrá su estación esa misma fecha, con la Línea 9.
El alcalde de Cerro Navia, Mauro Tamayo (Izquierda Ciudadana), comenta que aunque en su comuna vivan cerca de 130 mil personas, “no hay ninguna notaría ni centros comerciales. No tenemos oficina de Fonasa y contamos con solo dos bancos”.
Por lo anterior, celebra la futura llegada del metro, pues “actores públicos y privados son atraídos por una estación”. Ahonda en este punto y comenta que “se va configurando un valor distinto del uso de suelo y, por lo tanto, la llegada de servicios, porque habrá un mayor flujo de personas. Eso genera polos atractivos para inversiones de servicios útiles para la población”.
Fuera del sistema
Quien no se muestra tan optimista es el alcalde de Lo Espejo, Miguel Ángel Bruna (PPD). Para llegar al centro de Santiago, un residente de ese sector tiene dos opciones de transporte público: tomar un bus del Transantiago y combinar con el Metrotrén (viaje de 35 minutos), o subir a una micro y viajar hasta por una hora y media, si se circula en horario punta. Esto resulta paradójico, considerando que la comuna limita con dos autopistas y la cruza Av. Américo Vespucio.
Además, el edil afirma que no tener metro es un perjuicio para los vecinos, y que el Metrotrén, en vez de mejorar las cosas, las empeoró: “Hay más atropellos y delincuencia”.
Y enumera más carencias: “No hay cadenas de farmacias, hace poco abrimos la primera sucursal de banco, y solo hay tres cajeros automáticos, por lo que los vecinos tienen que ir a girar su sueldo a La Cisterna, lo que es un trayecto largo y peligroso”.
Su par de Lo Barnechea, Felipe Guevara (RN), secunda el deseo que tienen por acceder a la red. “Cerca de 800 mil trabajadores vienen diariamente, y el Transantiago colapsa. Puede ser que muchos de nuestros vecinos tengan auto, pero también quisieran ocupar un transporte público de calidad”, dice.
Soluciones
Bruna ha sostenido conversaciones con el alcalde de Cerrillos, Arturo Aguirre (PS), para ver si pueden abogar por una extensión de la Línea 4-A por Av. Américo Vespucio, hasta el Mall Plaza Oeste. Esta idea es apoyada por el director del Centro de Innovación en Transporte y Logística UDP, Franco Basso: “Américo Vespucio tiene la particularidad de poder hacer trazados en superficie. Cada kilómetro de la Línea 7 (que unirá de manera subterránea Renca con Vitacura) costará US$ 100 millones de dólares. En cambio, un tren en superficie sale la cuarta parte”, indica.
En el caso de Lo Barnechea, Basso sugiere “analizar un tranvía o transporte ligero que conecte al pueblo desde la futura estación Estoril de la Línea 7”. Además, constata que una meta a corto plazo de Metro de Santiago debiera ser “proveer a todas las comunas con su servicio”.
Guevara se muestra disponible para una mesa de trabajo con los alcaldes de Las Condes y Vitacura: “Estamos pidiendo una reunión con el Presidente Piñera para extender la Línea 7 hasta la esquina de Av. La Dehesa con Las Condes”, informa.
Mientras, Bruna espera conversar con la ministra de Transportes en marzo: “Creo que poco antes de 2030 tendremos metro. Vamos a estar jubilados, pero con metro”, afirma.
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Fuente: El Mercurio, lunes 04 de febrero de 2019

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