BIOBÍO CHILE – El nuevo Puente Ferroviario sobre el Río Biobío ya se perfila como una de las obras clave para el futuro del Gran Concepción. Este realza un valor muchas veces olvidado: la belleza escénica del río.
Su diseño más esbelto y contemporáneo se integra con la amplitud del paisaje fluvial, ofreciendo nuevas perspectivas hacia el cordón de cerros y la ribera, alcanzando una experiencia visual renovada, un nuevo hito arquitectónico que acompaña y resignifica la silueta tradicional del cauce.
Esta obra de arte está diseñada para soportar de mejor manera las condiciones climáticas adversas, así como los aumentos de caudal del río, ampliando considerablemente la cantidad de días sin tránsito, especialmente en el invierno, mejorando con ello la confiabilidad del transporte. Al ser un puente de doble vía, aumentará las ventanas de tráfico en ambos sentidos.
Esta iniciativa debe ser vista no como un término, sino como un punto de inicio para una ambiciosa agenda estratégica para la región. Desde la perspectiva del transporte público, permitirá aumentar frecuencias y mejorar la regularidad del Biotrén, fortaleciendo la conexión de Concepción con San Pedro de la Paz, Coronel y, a futuro, Lota.
La nueva infraestructura, más moderna y segura, elimina restricciones de velocidad y ofrece mayor confiabilidad, elementos clave para un sistema que hoy es la alternativa más eficiente frente a los crecientes niveles de congestión en los puentes viales.
Pero su impacto va más allá de los pasajeros. También abre una oportunidad histórica para potenciar el uso del ferrocarril como medio de transporte de carga.
Desde el punto de vista de la cadena productiva, una buena forma de reducir las emisiones es garantizar la continuidad operativa. Permitirá operar trenes más largos, más pesados y a mayor velocidad, lo que lleva a aumentar la transferencia de carga por esa vía, pasando de 9.000 a 13.000 toneladas diarias, equivalente a casi 500 camiones cargados menos en carreteras, permitiendo un tránsito más fluido y seguro para miles de vehículos livianos y buses, reduciendo los tiempos de viaje.
Así, se abre entonces una oportunidad para seguir potenciando el desarrollo ferroviario en la región, tanto para pasajeros como para la carga.
El desafío es complementar esta obra con el mejoramiento de la red ferroviaria al norte y sur del Biobío, conectado los centros industriales con los puertos, clausurando y soterrando los cruces a nivel, ampliando la doble vía ferroviaria que corre a lo largo de la Ruta 160, modificando y asegurando los trazados que pasan por el centro de áreas urbanas altamente congestionadas.
En definitiva, el nuevo Puente Ferroviario de Concepción no es solo una obra de ingeniería: es una pieza estratégica que moderniza la red de transporte, descongestiona la ciudad, recupera el valor paisajístico del Biobío y proyecta al Gran Concepción hacia un desarrollo más equilibrado y sustentable. Un puente que no solo conecta riberas, sino también calidad de vida con futuro.
Juan José Ugarte G.
Arquitecto, consejero Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI)
Ricardo Brunner
Ingeniero, consejero Corma
Fuente: Biobío Chile, Martes 18 de Noviembre de 2025
