DIARIO CONCEPCIÓN – Más de 5 décadas de funcionamiento tiene el Puente Juan Pablo II, de ahí la necesidad de realizar una reparación que al menos permita su funcionamiento por 10 años o un poco más.
El seremi de Obras Públicas, Hugo Cautivo, afirmó que ya realizaron la licitación de obras, que cerró el 30 de julio para la presentación de ofertas, faenas basadas en un diagnóstico de ingeniería efectuado entre 2022 y 2023, que determinó que el puente requería reparación de fisuras, grietas, hormigones con desprendimiento, juntas de dilatación y mejoramiento de pavimentos.
Además, reconoció que si bien con el paso del tiempo se habían realizado reparaciones en el viaducto, especialmente las efectuadas tras el terremoto de 2010, no eran del estándar que requería para conservarlo. Por ello, en el proyecto se repararán las veredas peatonales, dañadas principalmente por el robo de cables, que implicaron la destrucción de losas peatonales. Por lo tanto, ahora necesitan mejoras, como pasillos peatonales, barandas, reforzamiento de barras antisísmicas y, además, se incorporará un sistema de televigilancia por pórtico que permitirá identificar a quienes no cumplan la normativa de un máximo de 10 toneladas, fiscalizarlos y sancionarlos.
Falta de recursos
Sin embargo, a pesar de haber licitado la obra y contar con un oferente, el problema está en la falta de recursos.
“Nosotros teníamos cerca de $6 mil 600 millones para adjudicar las faenas, pero la oferta que nos llegó es superior en unos $3 mil millones, cerca de un 40% más”.
El seremi indicó que el proceso que ahora sigue para lograr reparar el puente es hacer una reevaluación de los costos y así lograr adjudicar la obra. Esto significa reevaluar el costo primero con el Ministerio de Desarrollo Social y luego pedir la autorización a la Dirección de Presupuesto (Dipres) para adjudicar las faenas.
Aseveró que ya están trabajando para iniciar todos los trámites administrativos para lograr comenzar la ejecución, y agregó que se requiere de un decreto complementario y que, si la Dipres autoriza los recursos para adjudicar, todo el proceso debería estar listo los últimos meses del año.
Segregaciones y cortes parciales
Cuando comiencen las obras, según dijo, no habrá cortes del viaducto en forma total, sino más bien segregaciones, con trabajos nocturnos y faenas que no coincidan con los horarios peak, de tal forma de generar un impacto menor en un viaducto que ya tiene una gran carga en materia de flujo vehicular.
“Tendremos, al igual que con otras obras, labores de coordinación, de preparación de trabajo con los municipios, con Carabineros y el Ministerio de Transporte, para poder tener los menores impactos posibles en lo que son los flujos vehiculares normales del puente”.
Al ser consultado sobre la posibilidad de cerrar el Puente Juan Pablo II de forma total, para hacer los trabajos más rápido y desviar el tránsito al Puente Industrial, obviamente sin cobro para las personas afectadas, afirmó que se debe entender que el Gran Concepción funciona en un sistema en red, en que cada uno de los puentes ejerce una función.
“Y en esto, en materia de comunicación entre la comuna de Hualpén y San Pedro de la Paz, más allá de que el Puente Industrial reviste un gran aporte a los problemas de congestión, igual el Puente Juan Pablo II tiene una carga importante en materia de flujo de vehículos particulares. Nosotros queremos privilegiar que el transporte de carga suba por el Industrial. Pero el Puente Juan Pablo II es una alternativa real importante en materia de comunicación entre el norte y sur del Biobío, sobre todo para vehículos particulares, y queremos que eso se mantenga. Por tanto, pensar en un corte total del Puente Juan Pablo II, sin que eso sea necesario por alguna medida de emergencia, no está dentro del horizonte que nosotros hoy día tenemos planificado”.

Nuevo puente
El jefe local de la cartera de Obras Públicas aseveró que considerando los años de funcionamiento que tiene el Puente Juan Pablo II y las afectaciones que generó el terremoto de 2010, que implicaron una serie de reparaciones de gran envergadura, están claros en que se necesita uno nuevo.
“Sabemos que estas conservaciones que se van a hacer, prolongarán su vida útil y sus condiciones en seguridad vial, pero estamos hablando de un puente que ya cumplió su ciclo de vida útil. Por tanto, ya hay que pensar en tomar decisiones en materia en la proyección del Puente Juan Pablo II. Y en eso estamos, en este minuto analizándolo junto con la Dirección Nacional de Vialidad. Esperamos antes de fin de año poder tener noticias en esta materia”
Aseveró que el desafío está en definir la reposicón del Puente Juan Pablo II, lo que es una decisión de costo mucho mayor, aún no definido. “Hay que pensar, digamos, desde el punto de vista de estructura, el puente Amdel tiene un valor hoy día entre 120.000 y $130.000 millones y el Puente Juan Pablo II Segundo es el más largo de Chile (…) uno pudiera acercar una cifra a $250 mil millones aproximadamente, pero esta es una primera apreciación”.
Comentó que se deben hacer estudios para ver qué tipo de puente podría ser y su ubicación, pero recalcó que es absolutamente necesario y que esperan tener resultados el próximo semestre.
El proceso de construcción, indicó, no sería rápido, pues debe pasar por prefactibilidad, factibilidad y diseño, y en el caso de Biobío, estudio de impacto ambiental, etapas que pueden tomar entre 6 y 8 años, para luego desarrollar la obra. “Todo eso la idea es que podamos desarrollarlo en en 10 o poco más años”.
Agregó que no se contempla en el nuevo proyecto mejoramiento ni reforzamiento de pilares, por lo que se mantendrán las 10 toneladas máximas, pues los pilares ya están mostrando asentamiento, lo que demuestra aún más que se requiere de un nuevo puente.
Próxima administración
La autoridad del MOP aseveró que están trabajando en una agenda bastante consciente en materia de estudios que se están realizando actualmente, pensados para el ingreso del Servicio Ambiental, como el diseño de ingeniería de Costanera Sur de San Pedro de la Paz que va a unir los puentes al Sur del Biobío; la construcción del puente Amdel y la costanera a Chiguayante que está en pleno desarrollo.
“Son varias obras, grandes obras que van a quedar para que el próximo gobierno pueda realizar su ejecución, van a entrar en etapa de estudio, necesario para la Región del Biobío como la capital logística del Biobío”.
Sumó también entre los adelantos la concesión de la Ruta del Itata que comenzará obras durante el segundo semestre, que se prolongará en el próximo período con una inversión sobre los 500 millones de dólares. “Estamos dejando una cartera muy robusta no sólo para el próximo gobierno, sino para los próximos 2”.
Fuente: Diario Concepción, Domingo 10 de Agosto de 2025





